Hasta las semifinales, Vezzali, campeona en las tres últimas ediciones --algo inédito en este deporte--, pudo soñar con un cuarto oro olímpico consecutivo. Pero no pudo superar a su compatriota Arianna Errigo, 14 años más joven.
Errigo se inclinó luego en la final frente a Di Francisca, que se impuso por 12-11 en la muerte súbita.
Con 38 años, la diva del esgrima tuvo sin embargo suficientes recursos para obtener la medalla de bronce contra la surcoreana Nam Hyun-hee. Dominada 12 a 8, logró seguir con vida a un segundo del final antes de imponerse (13-12), también en la muerte súbita.
Vezzali, abanderada de la delegación italiana en la ceremonia de inauguración, demostró una vez más su eficacia en Londres. Hasta hoy, su peor resultado en individual en los Juegos Olímpicos era un segundo puesto en Atlanta 96, en su primera participación.
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