El símbolo más reconocible de las Olimpiadas se construyó en aluminio y tiene una anchura de 12 metros, la misma que los característicos autobuses rojos de dos plantas que recorren la capital británica.
Los cinco anillos de colores (azul, amarillo, negro, verde y rojo) representan la unión de los cinco continentes en una competición deportiva, un emblema que "inspirará y emocionará a los visitantes" que lleguen al aeropuerto
El encargado de Planificación Olímpica de Heathrow, Nick Cole, señaló por su parte que el aeródromo será "la primera impresión sobre el Reino Unido para la mayoría de los asistentes a Londres 2012".
Los gigantescos aros son la primera muestra del espíritu olímpico que llega al aeropuerto con más tráfico de europa, uno de los puntos que más preocupan a las autoridades británicas de cara a los Juegos, tanto por la seguridad como por el colapso que podría sufrir debido al aumento de pasajeros.
El aeropuerto llegará al límite de su capacidad en los días posteriores a la ceremonia de clausura de los Juegos, el 12 de agosto, cuando se prevé que cientos de miles de personas abandonarán Londres en un corto periodo de tiempo.
Para tratar de amortiguar el impacto de esa afluencia masiva de viajeros, Heathrow ha previsto una terminal temporal de uso exclusivo para que atletas, oficiales y miembros del Comité Olímpico Internacional (COI).
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